Crónicas de un Sombrío

Algo pasa...lo noto, estoy seguro de que pasa algo aunque nuestros superiores no nos digan nada aparte de 'Inspección Rutinaria'. Lo huelo en el aire, lo veo en las flores, lo siento en la voz del Príncipe cuando habla a las tropas en público. Su cara ya no es la misma, las estrellas no brillan igual que antes, los árboles ya no nos hablan y crecen salvajes y silvestres sin que podamos moldearlos. El mar está oscuro y resacoso, sus rugidos y sus continuas olas, amenazan nuestras costas. Nos han enviado a recoger información de la Guardia Marina, pero han desaparecido...desde hace más de una semana no mandan exploradores con información al campamento...

Ésta ha sido la última señal que nuestro Príncipe necesitaba para convocarnos, todas su tropas...Hemos sido reclutados, formados y enviados a diferentes partes de nuestra isla sagrada Ulthuan. Nuestra misión, sencilla explorar el terreno aniquilando cualquier prsencia enemiga que encontremos. Debemos abrirnos paso hasta que encontremos a nuestros amigos de la Guardia Marina, ellos, o sus cadáveres...

Yo me encuentro en el regimiento más fuerte, junto a un batallón de arqueros, otro de lanceros, y lo mejor, han venido comandos de élite a apoyarnos, están los Leones y los Maestros de la Espada de Hoeth, siempre pesé que ellos solo existían en las leyendas de juglar, ahora veo que son realidad y imponen solo con verlos. Yo pertenezco a la élite de la sombra, soy un sombrío, un hostigador encargado de explorar el bosque sagrado cercano al templo de Asur.

Mis amigos y yo hemos entrado por el sendero principal, pero ocultandonos, haciendo nuestro trabajo como mejor sabemos. De momento nadie ha dado la alarma, ni los que han ido a explorar el lago, ni los que han ido hacia el Sur. En el bosque no hay ruidos, todo está muy silencioso, demasiado...