El asunto Pharmacon (IV)
Buenos días. Último capítulo de esta partida de Cyberpunk 2020 que llevamos ya tres semanas relatando en los Domingos de Rol de SdR.
Partida: El asunto Pharmacon
Master: Nimendil
Jugadores: Khazum, Ki, Leowin, Bano Tuk
Parte IV: La huida final
Después de toda la noche de tiroteos, persecuciones y huidas, el comando que perpetró el asalto a Pharmacon estaba ya en las últimas a primera hora de la mañana. Jay Coburn (Ki), Germán "Napalm" Orozco (Khazum), Jonnhy Morgul (Leowin) e Iron Panzer (PNJ) estaban escondidos en la salida de carga del Chromefour, dentro del perímetro policial, pero con posibilidades de burlarlo: estaban en una zona con pocos efectivos, casi todos estaban por el lado en el que estrellaron el coche. Que llegasen era cuestión, no ya de minutos, sino de segundos, porque el GEO que no había muerto de los que había dentro estaba ya alertando por el walkie. Un par de coches de policía, espaciados unos 10 metros, con un par de patrulleros cerca de cada uno cerraban el paso del grupo terrorista.
Las tornas cambiaron cuando el agente Saff Kovalik (Bano Tuk), un municipal fuera de servicio por acusación de asesinato, se presentó en la escena. Intentando hacer méritos para recuperar la placa, decidió ayudar a los terroristas, ya que Jay Coburn era amigo suyo y habían trabajado juntos en este mismo trabajo (formó parte del comando de la misión explicada en los antecedentes de la primera entrega). El grupo tiroteó a los policías que vigilaban la zona, subieron al coche patrulla de Kovalik y se dieron a la fuga. Pero a los pocos metros el agente Kovalik perdió el control del vehículo, que chocó con el mobiliario urbano hasta volcar en una estruendosa vuelta de campana. Los menos heridos, Orozco y Coburn, salieron del coche y huyeron de la zona. Kovalik se quedó junto al vehículo siniestrado, para fingir que había sido secuestrado y a pesar de todo se había salido con la suya. Arrestó a un aturdido Iron Panzer y sacó del coche patrulla el cuerpo mutilado y comatoso de Morgul. En seguida llegó la caballería, alertados por el accidente y por los avisos de agentes cercanos. Un AV-4 del Grupo Especial de Operaciones de la Policía comenzó la persecución de los dos terroristas huidos. Jay y Germán decidieron separarse. Coburn consiguió eludir los focos y halló refugio en un portal. Napalm no tuvo tanta suerte. Su pesada armadura de combate le impidió ser suficientemente sigiloso y el AV lo enfocó con el reflector, conminándolo a rendirse y deponer las armas. Germán siguió huyendo y lanzó una granada al vehículo aereo. Esto no gustó a los GEO's, que contestaron con una ráfaga del cañon rotatorio.
Napalm aguantó el tipo pero bajo tal intensidad de fuego tuvo que rendirse. Sin embargo aún tenía un par de ases en la manga. Mientras alzaba las manos y se agachaba para dejar su arma en el suelo, los GEO bajaron del AV para intentar detenerlo. Germán estuvo rápido y lanzó una granada sobre el grupo de policías, dejando a dos de ellos fuera de combate. Los otros tres abrieron fuego de inmediato, secundados por el cañón del vehículo. El temerario soldado intentó resistir, amaparado por su blindaje corporal, pero hasta la más alta tecnología militar acaba cediendo ante una buena ráfaga de plomo. Cuando los policías dejaron de disparar, el cuerpo de Napalm echaba más humo que C3PO en la despedida de soltero de Mace Windu.
El agente Saff Kovalik tuvo que responder muchas preguntas incómodas, pero al final consiguió convencer al comisario en jefe de Mega 4 de que era inocente en todo esto. Sólo estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado. Otra vez. Igual que pasó hace 3 años, cuando aquel cuerpo apareció cosido a balazos, con balas disparadas desde un arma reglamentaria, casualmente el mismo arma que estaba registrada a nombre de Kovalik. El comisario decretó esta vez que al haber sido de ayuda al detener a dos de los terroristas no se presentarían cargos contra él. Sin embargo debería mantenerse lejos de la actividad policial o sería tratado duramente, como civil que era en esos momentos.
Sobre los implicados en la persecución de esa mañana, el informe policial detallaba lo siguiente:
- Coburn, Jay: Médico de profesión. Acusado de asalto a mano armada con agravantes, secuestro, asesinato, homicidio, asociación ilícita, pertenencia a banda armada, desorden público, allanamiento de la propiedad privada y daño de la propiedad ajena, material e intelectual. Huido de la justicia. Busca y captura bajo condición de vivo o muerto.
- Orozco, Germán "Napalm": Soldado, veterano de las guerras centroamericanas. Acusado de asalto a mano armada con agravantes, secuestro, asesinato, homicidio, resistencia a la autoridad, obstrucción a la justicia, asociación ilícita, pertenencia a banda armada, desorden público, allanamiento de la propiedad privada y daño de la propiedad ajena, material e intelectual. Abatido por fuerzas de seguridad policial.
- Morgul, John: Sargento, desertor de los boinas verdes. Acusado de deserción, asesinato, robo de bienes públicos, secuestro, asociación ilícita, pertenencia a banda armada y desorden público. Arrestado y hospitalizado en grave estado de salud. En espera de juicio.
- Panzer, Iron: Ocupación desconocida. Acusado de desorden público, homicidio, resistencia a la autoridad, obstrucción a la justicia, asociación ilícita y pertenencia a banda armada. Arrestado. En espera de juicio.
- Kovalik, Saff: Agente del cuerpo de policía municipal. Licencia retirada por condena de asesinato. Acusado de asociación ilícita, obstrucción a la justicia y pertenencia a banda armada. Cargos retirados por actos de valentía y cooperación con el cuerpo.
Y así terminó el asunto Pharmacon. Los de Bio-Tech se desentendieron del grupo, para no ser vinculados a semejantes actos de terrorismo. Pharmacon Industries Corporation división Eurasia ha quedado temporalmente sin director general, ya que este se encuentra secuestrado y en paradero desconocido, pero al menos han conseguido mantener la custodia del valioso tanque criogénico y lo que en él se guarda, cosa que sin duda es mucho más valiosa que la vida de un sólo individuo.
Tal vez os preguntéis qué fue de Jay Coburn. El bueno de Jay consiguió eludir a la justicia. Durante el tiroteo final se refugió en un portal y desde allí accedió a un edificio, en el que se escondió hasta que la búsqueda policial se relajó. Después se puso en contacto con una de las enfermeras buenorras de su clínica para que lo ayudase a ocultarse. Quemando sus últimos contactos en el mundillo, se consiguió una cara nueva en la clínica ilegal de Doc Savage. Con la información que le pasó Gordo Master, Doc le puso a Coburn la cara del director de Pharmacon secuestrado, en previsión de una nueva acometida contra la corporación. De nuevo con el apoyo del corrupto agente Kovalik, Jay abandonó la ciudad y ambos se refugiaron entre la tribu nómada de los Centauros del Desierto, donde esperan a que todo se calme en Megacity 4 para volver a las calles a perpetrar algún nuevo acto de terrorismo, insurgencia o alteración del orden.
1 cosas (no) relacionadas:
¡y Jay sigue vivo! de momento
Publicar un comentario