Escucha la Llamada

Saludos, queridos amigos. Aquí tenéis una vez más a vuestro sherpa Nimendil, dipuesto a ofreceros un poco de sabiduría. Si, sé que la sabiduría siempre a veces os esquiva, pero no os preocupéis, yo voy a metérosla bien dentro. La sabiduría, quiero decir.

Supongo que todos sabréis que la vida pirata es la vida mejor, ¿verdad? Y supongo que todos buscáis lo mejor para vosotros mismos, ¿no? Ergo, podemos suponer que lleváis una vida pirata.

Pues bien, ¿cual es uno de los elementos fundamentales que no pueden faltar en la vida de un pirata? El ron, claro está.

Así que, si le dais a la vida pirata y consumís bien de ron, os debería sonar esto:

Cacique. Escucha la llamada.

Escucha la llamada... Escucha la llamada... Escucha la llamada...

Y os preguntaréis, ¿no suena esto muy cthulhiano? Pues sí. Lo mismo he pensado yo. Y siempre tan predispuesto, he pensado utilizar esta similitud en el mensaje para favorecer los intereses de nuestro señor, el todopoderoso Cthulhu, y conseguir adeptos a su causa mediante la publicidad engañosa.

Así que con mis conocimientos de Photoshop aprendidos en el Necronomicón, me puse manos a la obra.

Y en vista de los buenos resultados, presentamos hoy aquí, en SdR, el cursillo interactivo: Colabora con Cthulhu

Escucha la Llamada de Cthulhu.

Este es un cursillo interactivo, por lo que debéis seguir las instrucciones según las vayáis leyendo. Así que ahora es vuestro turno, queridos lectores. Si pincháis en la imagen podréis acceder a ella en una mejor resolución. Pinchad clic derecho y guardar. Una vez guardada, programad vuestra impresora para que la imprima en tamaño octavilla, a cuatro por folio. Cargad un paquete nuevo de folios, de esos de 500. Ahora cambiad las preferencias de impresión para que se impriman todos los folios, es decir, 2000 octavillas.


Mientras se imprimen podéis hacer vuestros rezos y sacrificios diarios, tampoco es cuestión de perder el dia...

Y si, seguro que muchos estaréis diciendo que con todo tan negro váis a gastar un montón de tinta. Pues mira, majo, esto es así. O Fhtagn o nada.

Bueno, una vez estén todas impresas, coged una guillotina para papel. Si no tuviéseis en casa, coged una guillotina normal, de ejecución, o cualquier otro útil de filo, ya sea hacha a dos manos, cimitarra, machete o daga ceremonial. Con la herramienta escogida hay que cortar los folios en cuatro, cuidando que sea en el sentido en que las imágenes salen enteras. Truco: Cortar los folios en grupos es más rápido que de uno en uno.


Bien, llegados a este punto, cada uno de vosotros debe tener 2000 octavillas preparadas, ¿verdad? Vale, pues ahora llega lo divertido: ¡A repartirlas! Ponte tu disfraz de sectario y sal a la calle. Reparte tus octavillas a los transeúntes. Los mejores sitios para repartir son las bocas del metro, aunque cualquier otro sitio muy transitado sirve: la puerta de la oficina, las clases de la universidad, la barra de un garito, la cola de espera de Urgencias, los baños de un restaurante, la salida de un concierto...

Respecto al público, lo mejor son los jóvenes. Son volubles e impresionables. Al ver un icono similar al del ron que están acostumbrados a beber, lo cogerán pensando que es el inocente flyer de una discoteca. Pero cuando lo lean, se verán atraidos, sus mentes sufrirán un cambio (perderán 1d40 puntos de cordura), y desde ese momento serán sensibles a la Llamada de Cthulhu y Él se aparecerá en sus sueños.

Así que ya sabéis: por cada ocatvilla bien repartida, ganaremos un fiel adepto.

Y si queréis tener más éxito aún, no hace falta más que repetir todo de nuevo, tantas veces como se desee. Cuantas más octavillas repartáis más alto será el puesto que os concederá Cthulhu el día de su regreso, así que ya sabéis...


En fin amigos, esto es todo. Ya sólo me queda una cosa más que decir:



¡PH'NGLUI MGLW'NAFH CTHULHU R'LYEH WGAH'NAGL FHTAGN!